Existe un falso imaginario respecto a lo que es la salud mental ya que muchas personas cuando piensan o les sugieren asistir a un psicólogo, asumen que no están “locas” y se niegan la oportunidad de tener un apoyo profesional que puede ayudarles a cambiar su vida.
La OMS, define la salud mental como un estado de Bienestar en el que las personas se desarrollan, trabajan, disfrutan de lo que hacen y afrontan las dificultades de la vida de forma positiva.
Comprender que todo lo que afecte ese bienestar puede ser considerado un riesgo, es asumir la vida con sus vulnerabilidades y con la tranquilidad de saber que en cualquier momento podemos necesitar de un terapeuta que nos ayude a ser mejores personas. A continuación encontrarás cinco factores claves de riesgo, que te indican que es necesario buscar ayuda profesional:
Violencia Intrafamiliar:
Si has sido o eres víctima de cualquier forma de violencia ya sea física, psicológica, económica o sexual al interior de tu familia, por parte de tus padres, hermanos o tu pareja, puedes tener daños psicológicos y emocionales complejos que afectan tu vida y bienestar.
Situaciones de Crisis:
La pérdida afectiva, los cambios súbitos, los factores económicos, la presión social, el trabajo y estrés derivado del mismo, pueden desencadenar síntomas como dificultades para conciliar el sueño, tristeza, ansiedad, inseguridad y baja autoestima.
La forma como piensas:
Tu forma de pensar, sentir y actuar son determinantes para preservar la salud mental. El pensamiento negativo y autodestructivo, la inseguridad, la crítica permanente aumentan el malestar emocional, la irritabilidad y el estrés
Dificultades para controlar tus emociones:
Si tienes problemas constantes con las personas que te rodean porque no logras controlar la rabia, el mal genio y terminas haciendo daño a las personas que quieres, es necesario que busques ayuda para mejorar tu autocontrol.
Tendencia a las adicciones:
Una adicción se ve reflejada en un comportamiento que no logras controlar, pero te es difícil reconocerlo. El alcohol, drogas, juego, sexo e incluso la religión cuando empiezan a generar problemas en la familia, trabajo o en tu estudio, es porque se están convirtiendo en una situación más grave de lo que piensas y puedes terminar dañando tu vida.
Como puedes ver la salud mental es un asunto de todos, de la cotidianidad, de la forma de enfrentar la vida, los problemas. Mírate constantemente para detectar a tiempo cualquier situación que te pueda afectar emocional y psicológicamente. No dudes en consultar con un experto porque es tu vida y la de las personas que te rodean la que está expuesta al riesgo. Es normal y humano pedir apoyo y también sentir miedo de hacerlo.